Luego de la reconquista, el primer problema a encarar era quién mandaría, en adelante, en el Virreinato del Río de la Plata. El vecindario no estaba dispuesto a aceptar la continuación del marqués de Sobremonte, quien venía de Córdoba con 3.000 hombres cuando ya habían sido batidos los ingleses. Su abandono de la capital lo había desacreditado sin remedio.
Por eso, el 13 de agosto se convocó a una suerte de "Cabildo abierto" para el día 14. Esa asamblea, de un centenar de vecinos, resolvió informar del triunfo al rey y organizar fuerzas ante la posibilidad cierta de una nueva invasión. La Real Audiencia era partidaria de organizar solamente una "junta de guerra" y esperar la decisión del virrey sobre la recluta. Pero la presión popular fue decisiva. No se quería que volviera Sobremonte al mando. Los cabildantes terminaron confiriendo el mando militar a Santiago de Liniers y el mando político a la Audiencia, lo que en los hechos significaba la destitución del marqués. Un año más tarde, el monarca designaría a Liniers como virrey interino.
Sobremonte se indignó con la decisión de los vecinos, pero tuvo que aceptarla. No entró en Buenos Aires. En San Nicolás anunció que se trasladaba a Montevideo, para desde allí dirigir la defensa de la ciudad si se producía un nuevo ataque. Sin duda que esto último era bien previsible. Confirmaba los temores la presencia de la flota de Home Popham, que seguía merodeando por el estuario.
Liniers tomó con anticipación los recaudos para no dejarse sorprender. En setiembre convocó a la incorporación de voluntarios, medida que tuvo gran eco en el pueblo. Al mes siguiente, las milicias de Buenos Aires sumaban alrededor de 8.500 hombres, de los cuales sólo unos 3.000 eran españoles. Los infantes criollos formaban sobre todo en el Regimiento Patricios, que mandaba Cornelio Saavedra, y los de caballería en el de Húsares, cuyos escuadrones estaban a cargo de Juan Martín de Pueyrredón, Lucas Vivas y Ramón Núñez. Los españoles se agrupaban en los regimientos Andaluces, Gallegos, Miñones, Vizcainos y Montañeses.